Tras cuatro temporadas de ausencia de aguas vivas en Monte Hermoso y Pehuen Có, miles de turistas se alarmaron este fin de semana por la presencia de un tipo de medusas poco conocidas que arribaron a estas costas como consecuencia de intenso viento del norte registrado en los últimos días.
Sin embargo, a diferencia de las que se distinguen por la cruz roja (Olindias Sambaquiensis) y cuyos filamentos provocan fuerte ardor; y de las conocidas como “tapiocas”, que generan irritación y escozor en personas con piel sensible, esta especie parece totalmente inofensiva.
Se denominan Aequorea Forskalea y hace 3 temporadas que se observan en Monte Hermoso, aunque este fin de semana su presencia aumentó considerablemente.
Si bien se ven filamentos y un formato llamativo que a la noche reflejan una luz verde, no pican y tampoco producen comezón o ardor.
Tienen un tamaño que puede oscilar entre los 8 y 25 centímetros de diámetro, aunque las que se apreciaron en nuestras playas son más pequeñas y se caracterizan por la presencia de varios canales radiales de color marrón oscuro o azulado del estómago hacen su camino hasta el borde de la sombrilla.
Esta medusa es una especie pelágica extendida en el Océano Atlántico, en el Mediterráneo, en el Océano Índico y en el Caribe. Vive generalmente en las grandes profundidades, pero suele observarse en las proximidades de la superficie o varadas en la playa.
También, pero en menor proporción, se advirtieron algunos ejemplares de otro tipo de medusa denominada Chrysaora Láctea que producen un ardor leve, que se va después del primer contacto, aunque en personas alérgicas a otro tipo de picaduras puede ocasionar irritación en la piel que también desaparece minutos después.
Fuente: Julieta Lecanda (Museo de Ciencias Naturales de Monte Hermoso Vicente Di Martino)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.