Todo pescador deportivo debe tener en cuenta que los peces son
nuestro recurso acuático de mayor interés, ya que son la causa de
grandes satisfacciones en diferentes momentos y etapas de nuestras
vidas, ningún pescador deportivo necesita sacrificar los peces para
su propia diversión o depender de ellos para alimentarse, sino que
debe respetar y apreciar al animal que está en el extremo de su línea.
Con el fin de preservar este preciado tesoro para las futuras
generaciones, que son ni mas ni menos que nuestra permanencia a lo
largo de los tiempos, se deben tomar medidas que permitan mantener
la coexistencia del pescador deportivo y el desarrollo de nuestro
santuario marino.
Si bien, no todos piensan de la misma manera, usando redes de
aberturas chicas o intentando llevarse todo lo que atrapan, pensando,
“si no me lo llevo yo se lo lleva otro”,” no pasa nada, lo que hago yo
no afecta” (pensamiento de la edad media que provoco la destrucción
total de la tierra por sobreexplotación en Europa y entre otras cosas
la caza indiscriminada de las ballenas en todos los mares), debemos
tener en cuenta que todos somos testigos de lo esta ocurriendo (cada
vez menos capturas y menores tallas).
Los cambios son siempre difíciles, pero no imposibles. Como todo
cambio debe tener un principio, que por mas insignificante que sea,
altera el curso de la historia y nosotros tenemos la capacidad de dar
ese primer paso, consiguiendo un uso sustentable de los recursos
acuáticos y tomando conciencia de que el mar no es infinito e
inagotable.
nuestro recurso acuático de mayor interés, ya que son la causa de
grandes satisfacciones en diferentes momentos y etapas de nuestras
vidas, ningún pescador deportivo necesita sacrificar los peces para
su propia diversión o depender de ellos para alimentarse, sino que
debe respetar y apreciar al animal que está en el extremo de su línea.
Con el fin de preservar este preciado tesoro para las futuras
generaciones, que son ni mas ni menos que nuestra permanencia a lo
largo de los tiempos, se deben tomar medidas que permitan mantener
la coexistencia del pescador deportivo y el desarrollo de nuestro
santuario marino.
Si bien, no todos piensan de la misma manera, usando redes de
aberturas chicas o intentando llevarse todo lo que atrapan, pensando,
“si no me lo llevo yo se lo lleva otro”,” no pasa nada, lo que hago yo
no afecta” (pensamiento de la edad media que provoco la destrucción
total de la tierra por sobreexplotación en Europa y entre otras cosas
la caza indiscriminada de las ballenas en todos los mares), debemos
tener en cuenta que todos somos testigos de lo esta ocurriendo (cada
vez menos capturas y menores tallas).
Los cambios son siempre difíciles, pero no imposibles. Como todo
cambio debe tener un principio, que por mas insignificante que sea,
altera el curso de la historia y nosotros tenemos la capacidad de dar
ese primer paso, consiguiendo un uso sustentable de los recursos
acuáticos y tomando conciencia de que el mar no es infinito e
inagotable.
Román Uibrig.
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