POSADAS.- Como consecuencia de copiosas precipitaciones registradas en el norte del territorio provincial y en los estados brasileños de Santa Catalina y Paraná limítrofes con Misiones, los ríos Iguazú y Paraná bajan con enorme caudal generando nuevamentedesbordes en las Cataratas y obliga a la Administración de Parques Nacionales (APN) a aplicar el protocolo de seguridad para toda el área, donde se despeñan 250 saltos, el mayor llamado Garganta del Diablo, de 80 metros de profundidad.
La fuerte riada soltó amarras del casino flotante de Puerto Iguazú, el que primero quedó a la marced de la corriente pero ahora se encuentra anclado medio del estuario, según reflejan imágenes difundidas por el sitio Radio Cataratas.
Según la información de la Oficina de Prevención de Desastres Naturales (Opad), el Iguazú, que nace cerca de Curitiba (Brasil), llega a la Triple Frontera donde desemboca en el Paraná con el triple de su módulo normal. El nivel en aquel puerto es de 34,30 metros y sigue subiendo.
El Paraná que igualmente nace en Brasil por la confluenciade los ríos Grande y Paranaíba, arrastra también gran caudal, a punto que en el puerto misionero de Eldorado la altura es de 17,32 metros, en Santa Ana, de 8,65 y en Posadas de 10,30, todas en aumento.
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